martes, 5 de junio de 2007

Poeta bebe whisky (y también café...)

La plática llevaba ya varias horas: había transitado por viejos amores, reencuentros, libros, proyectos, música, poetas...
Afuera del Vips donde estábamos una mujer estilo calendario, usaba una microfalda y una blusa que incluso a una niña le hubiera quedado apretada...
La luna se perdía detrás de un edificio, el café ya comenzaba a convertirse en ácido al paladar (¿cuántas tazas habíamos tomado?)...
Él me contaba de una mujer que le gusta, de los métodos que piensa usar para acercarse a ella. Hasta que de repente se iluminó la noche:
—El otro día soñé con ella, y al despertar traía una frase en la lengua... Quiero escribir un poema con esa frase... —dijo sin atreverse a repetir lo que aquella mañana había pensado —Sé que por ti me volvería militante...
Y la frase quedó en el aire.
De inmediato imaginé a Tom Hanks diciéndole a Meg Ryan ese verso en alguna película, fantaseé con la idea de que mi amigo se acercaba a una banca en la Facultad de Filosofía y Letras y le decía a esa mujer: "Me permites un segundo, me gustaría hablar contigo". "¿Hablar de qué?", respondería ella. "Es que necesito decirte que ayer soñé contigo y supe que por ti me volvería militante".
Al menos ella se reiría, le dije cuando le compartí mi pensamiento. Él no estaba muy seguro de que eso pasara, sin embargo, dijo que lo intentaría...
—De no funcionarte —le dije muy serio —dejaría de creer en el amor... Exageré, dejaría de creer que aún hay mujeres a quienes les gusta el romanticismo...
Ray Coniff zumbaba a través de la música ambiental... Él, mi amigo, ya tenía un plan... Yo me había quedado con esa frase en la cabeza, creyendo que merecía estar en todas las antologías de poemas de amor... Pero ya saben, siempre he sido un cursi...

No hay comentarios: