En una entrevista, Guillermo del Toro confiesa que de niño le gustaba leer, dibujar y jugar con los insectos que había en el jardín de su casa.
Luego, casi como sin querer, suelta en tono de profeta: "La única obligación de un hombre es hacer feliz a su mujer".
Sonrío y apago la tele. Tiene razón...
Que pasen un excelente fin de semana.
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