martes, 27 de noviembre de 2007

"¿ Cómo pues?"

Entonces éramos novios y no teníamos mucho dinero. Habíamos pasado la noche en mi oficina terminando un proyecto de la universidad y después, ya cansados, habíamos caminado hasta el departamento donde vivía para dormir un poco.
Al despertar nos dimos cuenta que sólo teníamos diez pesos para pasar el día, además, debíamos ir a casa de Chuy para completar el proyecto escolar y después regresar a trabajar.
Ambos nos pusimos tristes.
—No te preocupes —, dije sin mucha convicción —ya Dios proveerá, al menos eso dice mi mamá.
Pensé de dónde podría obtener dinero, esculqué ropa para ver si había algún billete olvidado, pero nada. Tomamos un micro, después el Metro, y con un peso en la bolsa y mucha hambre, tocamos a la puerta de Chuy, quien por cierto aún no había terminado de bañarse. Su mamá nos ofreció un café, fue por huevo a la tienda y nos preparó huevo con papás y chiles verdes. Nos calentaba tortillas y nos las daba recién salidas del comal. La Chuy, creo, seguía arreglándose.
Después Chuy salió sin maquillarse (era otra persona, ni mejor, ni peor, sólo otra) y como siempre hacía, consiguió que riéramos toda la mañana. Después nos disparó los pasajes hasta el trabajo y por la tarde conseguí un poco más de dinero (no sé si prestado o ese día me pagaron).
Estoy seguro que Chuy nunca se enteró de cómo ese día nos había alimentado y nos había devuelto la esperanza; y estoy más que cierto que si hoy se lo contara no lo creería, pues han pasado muchas cosas entre nosotros (secretos, intrigas, fiestas, brindis, bailes, enojos, silencios). Tanto así que hace unos días no recordé su cumpleaños y por lo tanto no le llamé por teléfono ni le mandé un correo, ni bromeé con ella sobre su gusto (desde siempre) por los koalas, ni le recordé cuando una madrugada le pidió crema para sus labios (había besado mucho) a quien hoy es mi esposa, ni le pregunté si aún le gusta Banda El Recodo, ni si ha sabido algo del prófugo Federal (su perro sin pedigri y muchas pulgas), ni sé si continúa con el cabello castaño o pelirrojo o negro; ni si ahora los planes de boda sí van en serio (desde que la conozco dice que el año siguiente se casará), ni cómo están sus hermanos, sus papás, su novio, su vida, sus bailes, sus bromas, sus palabras y si aún, después de todo, la puedo seguir llamando AMIGA...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

yo tampoco lo sé, quizá hoy lo averiguemos, yo también siento con el alma no haberme acordado de ese día tan especial!!

Anónimo dijo...

Oi, achei seu blog pelo google está bem interessante gostei desse post. Gostaria de falar sobre o CresceNet. O CresceNet é um provedor de internet discada que remunera seus usuários pelo tempo conectado. Exatamente isso que você leu, estão pagando para você conectar. O provedor paga 20 centavos por hora de conexão discada com ligação local para mais de 2100 cidades do Brasil. O CresceNet tem um acelerador de conexão, que deixa sua conexão até 10 vezes mais rápida. Quem utiliza banda larga pode lucrar também, basta se cadastrar no CresceNet e quando for dormir conectar por discada, é possível pagar a ADSL só com o dinheiro da discada. Nos horários de minuto único o gasto com telefone é mínimo e a remuneração do CresceNet generosa. Se você quiser linkar o Cresce.Net(www.provedorcrescenet.com) no seu blog eu ficaria agradecido, até mais e sucesso. If is possible add the CresceNet(www.provedorcrescenet.com) in your blogroll, I thank. Good bye friend.