Narradores de los setenta

Hace unas semanas Jaime Mesa escribió en Milenio un artículo sobre la generación de narradores nacidos en los setenta. Según Mesa, esta generación carece de una obra que los legitime (pone como ejemplo La región más transparente para los escritores de ese tiempo) y no encuentra un Gran Tema que los identifique.
Esto me ha revoloteado desde ese día.
Pienso, en primer lugar, que entre mi hermana (nacida en 1972) y yo (1978) no existe mayor coincidencia que los apellidos, así que me parece imposible agrupar a ciertos narradores sólo por su fecha de nacimiento. Además, pienso en los narradores que él propone para su lectura. Desafortunadamente desconozco a la mayoría.
De la lista que Mesa propone he leído a Ernesto Murguía, Geney Beltrán, Federico Vite, Heriberto Yépez, Guadalupe Nettel, Alberto Chimal y David Miklos (actualmente leo a Mariño González) y si bien es cierto que tienen una propuesta, no creo que hayan escrito ya la obra que los defina como escritores "mayores de edad". A algunos otros de los mencionados por Mesa he intentado leerlos, sin embargo sus libros no han logrado atrapar mi atención.
Pienso, además, que existen otros tantos escritores que sin estar en esa lista, tienen una madurez mayor (Édgar Omár Avilés, Antonio Ramos, Vicente Alfonso), sólo que todavía no publican en las grandes editoriales.
Pero la cuestión que quiero exponer no es esa, a final de cuentas, sino que a muchos de esos escritores los conozco por buscar y rebuscar en las librerías, porque algún amigo escritor me habla de ellos o porque de repente aparecen en antologías (la mayoría auspiciadas por entidades gubernamentales) y a mí me gusta explorar esos libros (muchas veces baratos) que está publicando, por ejemplo, Tierra Adentro. Otros tantos los he leído porque mi espoa, cuando viaja a los estados, entra a las librerías locales y me compra a autores que en el DF son difíciles de conseguir (pienso en Montserratt Hawayek y su novela Tee, en Óscar David López y su novela Nostalgia del lodo, aunque ambos no son de los setenta).
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Ayer andábamos en el Zócalo y nos metidos a Gandhi y El Sotano de Bellas Artes. En ambas librerías pregunté por libros de Édgar Omar Avilés, de la Editorial Ficticia, de la Editorial Arlequín, Almadía, de Tierra Adentro y los encargados desconocían incluso el nombre de las editoriales. "¿Édgar Omar Avilés?", preguntaban como si yo les quisiera tomar el pelo inventando a algún escritor.
Ya de salida de Gandhi observé que en la mesa de novedades, abajo, en un rincón, estaba el nuevo libro de Eve Gil y algunos otros de Arlequín. Sin embargo, yo era el único que me detenía a buscar en esos sitios, ya que los demás concurrentes sólo observaban las novedades de Alfaguara, Tusquets, Joaquín Mortiz, Anagrama.
Entonces, lejos de que haya listas sobre escritores de los setenta, de que algunos de ellos ya estén publicando en grandes editoriales (por cierto que sus libros también son difíciles de conseguir: A.B.U.R.T.O., por ejemplo), ¿quiénes están leyéndolos? ¿Quién, por ejemplo, prefiere recorrer cinco librerías para comprar el libro de Édgar Omar Avilés a comprar en la primera a un "autor consagrado" por un precio mucho más económico (con eso de las ediciones de bolsillo...)?
A lo mejor, pienso, la pregunta no sería quiénes son los escritores de los setenta que están despuntando, los consagrados ya, sino quién, en realidad, los está leyendo.
¿No será que esa generación se autoalimenta de lo que produce?
PD. Me dicen que pronto saldrá una antología de autores de esta generación llamada Grandes Hits Vol.1, editado por Tryno Maldonado en Editorial Almadía. Reune el trabajo de Alberto Chimal, Bernardo Esquinca, Bernardo Fernández Bef, Julieta García González, Jorge Harmodio, Luis Felipe Lomelí, Mayra Luna, Alejandra Maldonado, Alain-Paul Mallard, David Miklos, Eduardo Montagner, Guadalupe Nettel, Antonio Ortuño, Antonio Ramos, Pablo Raphael, Juan José Rodríguez, Ximena Sánchez Echenique, Martín Solares y Heriberto Yépez. Habrá que esperar y leerlos.